Estabamos haciendo un curso de fotografía, de la mano de Nagore Legarreta y surgió así, de forma espontanea, como surgen esas cosas que acaban siendo un éxito, Era una oportunidad maravillosa de conocer otra cultura y poder fotografiar un mundo de colores infinitos . . . Lo que no sabía era que ese viaje iba a cambiar mi vida . . .

Una incursión por los exóticos feudos de los antiguos majarahás, esencia pura de una tierra multiracial y multicultural como es India.

Un viaje embriagador, colores, olores y sabores que me cautivaron para siempre.